viernes, 25 de mayo de 2012

32 años después...........el retorno.

Ayer acabé el artículo con unas cuantas fotos de la fiesta, sin más comentarios, así que ahora toca cerrar el evento con el fin de fiesta y la vuelta a casa.

Acabamos la cena, que incluía paseo con limusina, espectáculo con dos artistas extraordinarios y baile y al salir a la calle, la gran sorpresa: una lluvia torrencial que, dejándonos empapados, enfrió los ánimos. 

Unos pocos valientes quisimos continuar, ya fuese la penúltima copa, ya un chocolate con churros calentitos, pero, ¡ay!, la lluvia había enfriado Barcelona. A las cuatro de la mañana todo cerrado o más bien muy pocas cosas abiertas..... quizás a nuestra edad ya no correteamos tanto la noche y ya no estamos "al loro" de dónde se continúan éstos homenajes a la noche fiestera. El caso es que a las cinco y once de la noche ya estaba metido entre las tibias sábanas de mi camita, cosa que, mojado como un pollo, agradecí mucho.

La despedida final a mis compañeros, frente al cajero automático de un parking del Port Olimpic, fue, para mi, de una emoción indescriptible, que como buen machote, superé sin evidencias palpables. Vamos, que no lloré, pero faltó poco.

Durante todo el domingo me sentí vacío. Feliz por compartir el día con mis padres, ya mayores, pero vacío.

Vacío por la perdida física de mis amigos reencontrados.... ¿cuando volveré a verlos? ¡Que difícil!
Vacío por la añoranza de Araceli y mis hijos... ¡tan lejos aún!

Vacío.

Tuve que salir a pasear un par de veces por el barrio. Quizás para respirar una vez más los aromas de esa emocionante noche... quizás para revivir, en mi intimidad personal, un detalle, un momento, un recuerdo....

A las 10 de la noche tomaba el tranvía que me llevaría a la Estació Nord para enlazar con mi autobús hacia Madrid. Ya publiqué la foto...


Resume esa sensación de vacío opresivo y ... algo más ...

¡Tantas cosas en el tintero!... por preguntar... por decir... por confesar... a ella, a él.... y que seguirán encerradas en mi cabeza ¿durante cuantos años más?

Durante la espera del autobús, escribí mensajes a Araceli contándole que no estaba bien: había encontrado y había perdido y me volvía con la certeza de que salvo un cambio radical en mi vida que me permita unas vacaciones, sólo volveré a Barcelona para algo familiarmente grave. ¡Cosas de la vida!

6 comentarios:

  1. Enga ya!!! y no volverás antes de los mil dias????

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  2. Pero si podemos hacer encuentros....no te lo tomes asi...ahora estaremos en contacto con tu proyecto de cuentos ?----mira que la proxima nos tienes a todooooossssytodaaassss....en tu pueblin eh? uiuiui...que te la vamos a liar y ya veras tu....je,je,je....sacos de dormir por toda la casa....Besotes!!
    Isa.

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  3. Bueno es lo normal en la vida, no se puede retener toda la vida a todas las personas que pasan por ella. Es una de las lecciones que hay que aprender.
    Muchos ánimos. Un abrazo compi!

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  4. Ahora leo esto. Fué un encuentro genial y lo repetimos cada año, así que seguro que a algún otro volverás.
    De momento, al menos hemos de pensar que la red nos mantiene a todos unidos y eso es algo positivo.
    Un abrazo

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