Feliz Cumpleaños

Aprovecho que hoy es su dia, para comentar que el otro día se celebró la fiesta del cumple de una niña de seis años: Rosa.

Intentas que viva con normalidad la multiculturalidad reinante incluso en un pueblo como éste y ella lo tiene completamente asumido como normal. En su clase creo que hay chinos, marroquíes, rumanos.... en fin, un conjunto mas o menos heterogéneo de chavales compartiendo aula, vivencias y amigos. Y cuando llega el día de la fiesta te das cuenta de varias, pero básicamente, de dos cosas: que los amigos de Rosa son todos de familias españolas-de-toda-la-vida y que quien faltó fue una niña marroquí.

Incluso con esfuerzo y a veces a regañadientes, en esta casa se intenta apartar a los niños de planteamientos xenófobos que no conducen a nada, pero, en muchas ocasiones (como en este caso) tu lo pones todo de tu parte y los "diferentes" se auto-excluyen. Interesante. Si, porque ella misma, Rosa, sin nosotros quererlo, se da cuenta de cosas que luego es difícil explicar adecuadamente y muy fácil tergiversar y complicar.

Para todos los niños y niñas se preparó un paquetito con chuches y otras cosillas y Rosa, esta mañana le ha llevado a la niña que faltó su paquetito:

- Como no pudiste venir te traigo el regalito que tenía para tí - me ha dicho que le ha comentado a su amiga.

¡Que fáciles son las cosas cuando se tienen seis años!. ¿Porqué implicamos a niños de esa edad en las cosas de los adultos? ¿Porqué no somos capaces de intentar, aunque con esfuerzo, actitudes constructivas? ¿Qué mundo estamos construyendo en las mentes de esos niños? ¿No podemos aprender de esos niños al menos un poco?

Tal y como estamos formando a nuestros hijos.... ¡quien sabe!... quizás algún día, unos pocos, nos encontremos como Spencer Tracy y Katharine Hepburn cuando su hija, formada en el "todos-somos-iguales-que-importa-el color-de-la-piel" se enamora de un eminente médico.... negro. ¡Es que yo ya me imagino las escenas de esa película pero con nosotros como personajes!. Recomiendo encarecidamente su visionado para pasar un buen rato y para pensar en aquello de ¿me pasará a mí lo mismo? 

Carátula de Adivina quien viene a cenar.