He organizado, o mejor, llevo unos días que ha mejorado la organización de la comida del mediodía y los deberes de los chavales. Bueno, en verdad yo no he sido, ha sido mi suegra, ya que comemos en su casa. En resumidas cuentas el asunto se concreta en dos cosas: La primera es que raro es el día que a las tres de la tarde ya no hemos comido. La segunda es que pongo a los chavales a hacer los deberes despues de la comida. Como resultado de ámbas cosas dispongo de unos treinta minutos de paz para mi.
Sin tele, sin ordenadores.... ataco la biblioteca de mi cuñado donde una verdadera montaña de libros siempre me han estado esperando.
Salva, mi cuñado, hace ya tiempo que nos dejó pero sus libros siguen aquí. Incluso hay algunos precintados que no llegó a leer. Novela, historia, ciencia,... de todo. Le encantaba leer y saber. ¡Cómo me acuerdo de ti!
Bueno, pues estos días he descubierto una colección de libros en la que, aun estando a la vista, nunca había reparado. Unos pequeños libros que repasan en profundidad momentos históricos contemporáneos.
La gracia de éstos pequeños libros es que escojen un tema y lo desmenuzan completa pero brevemente. Al final en cada libro se repasan unos cinco o seis momentos de la historia.
Es lo que me gusta: un relato corto. No es tan corto para que me lo pueda leer en los treinta minutos que tengo libres pero me lo puedo ventilar en un par o tres de sesiones. Una hora y media más o menos. ¡Justo a mi gusto!
Los pequeños libros rojos me llamaron la atención y cojí uno al azar: Los secrteos de la guerra fría, volumen cuatro. No empecé por el uno porque una foto del Che Guevara en un cuadrito de la portada me llamó la atención. Ataqué las primeras lecturas.
Algunas cosas extrañas y desconocidas, la mayoría, me iban describiendo paisajes, sentimientos y acciones totalmente desconocidas para mi y ocurridas mas o menos hacia los años de mi nacimiento. Eso fue lo que, una vez leyendo, me llamó mas la atención: estaba leyendo cosas que pasaron mientras que yo ya estaba en éste mundo y de las que no tenía ni la menor idea.
La independencia de Argelia o del Congo y temas relacionados, como atentados o "accidentes", la invasión de la Bahia de Cochinos en Cuba.... enfín, cosas como estas. Todo en un apasionante estilo historico-periodistico-analítico que hace que cada día tenga ganas de seguir leyendo, para regocijo y sorpresa de toda la familia.
Acabé ese volumen cuatro y claro, de cabeza a por el primero. Estoy "viviendo" el inicio de la Guerra Fría tras la segunda guerra mundial y concretamente estoy en un Berlín que está sufriendo el bloqueo de las tropas sovieticas, justo antes de que se levante el muro.
Apasionante.
Me encanta revivir la historia.
Si encuentro algún secreto digno de mención, a buen seguro que os lo acabaré explicando.
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