martes, 21 de septiembre de 2010

Marta

Hoy me he quedado con Marta, mi hija más pequeña, en casa. Tenemos hora con el pediatra para la revisión y no ha ido a la Escuela Infantil como hace habitualmente.
Ella tiene dos años recién cumplidos.
Hemos llevado a sus hermanos Juli y Rosa al cole, hemos dejado a mi pareja en su trabajo y nos hemos quedado solos para compartir una mañana como hacía mucho tiempo que no hacíamos.
Es fantástico. La he llevado a uno de los bazares del pueblo, donde se entremezclan periódicos, revistas, material escolar, juguetes, libros, colonias... y ella "flipaba".
Que si Bob Esponja, que si Mickey Mouse... todo ello explicándomelo en voz alta y con un parloteo solo entendíble por sus allegados.
- ¡Hay que ver lo que hablas! ¿Cómo te llamas? - preguntaba Alicia, la propietaria
- ¡Batta!- contestó
Alicia me mira solicitándome la traducción.
- Marta, te llamas Marta, ¿verdad? - dije
- ¡Tí! - me contestó risueña.
- La verdad es que mi casa es una fiesta continua... vamos, que estamos entretenidos.
Si. Hace unos meses sólo decía palabras sueltas, ahora mantiene cierto nivel de conversación, con el parloteo descrito, y en muy poquito tiempo eso desaparecerá. Es uno de aquellos momentos únicos y que merece la pena hacer todo lo posible por vivir junto a ellos.
Tengo cinco hijos. Tres son los que viven conmigo y mi pareja actual y estoy haciendo lo posible por disfrutar con ellos y de ellos en cada momento de sus vidas.
Me encanta. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Desde aquí puedes participar tambien tú.